En caso de fístula urinarias, ya sea con la vagina o el tubo digestivo, se puede producir escapes involuntarios de orina o emisión de gases por la uretra. Si no se opera, estos síntomas no desaparecen. En ocasiones, las fístulas pueden cerrar espontáneamente colocando una sonda vesical, pero en general se requiere intervenirlas quirúrgicamente.