¿Cómo se diagnostica el cáncer de próstata?
Un diagnóstico bien realizado y en el momento adecuado puede salvarte la vida. Contamos con los mejores especialista de en la unidad, con tratamientos pioneros basadas en las últimas investigaciones y la tecnología más innovadora para mejorar tu calidad de vida.
El diagnóstico del cáncer de próstata se realiza mediante una serie de pruebas:
Si se detecta alguna anormalidad en las pruebas anteriores, se puede indicar la realización de otras pruebas, como las siguientes, para determinar si se tiene cáncer de próstata:
Cuando la biopsia confirma la existencia de un cáncer de próstata, el siguiente paso es determinar su nivel de agresividad (grado). Un mayor grado indica un cáncer más agresivo con mayor probabilidad de metastatizar o propagarse rápidamente. Con el fin de determinar la agresividad del tumor, las técnicas utilizadas incluyen:
Aparte de estas pruebas, hoy en día, también se dispone de test diagnósticos que facilitan la detección del cáncer de próstata antes de padecer sintomatología: pro-PSA, 4kalicreinas, PCA-3, MDX y otros.
Una vez que se haya confirmado el diagnóstico, si hay sospecha de que el cáncer puede haberse extendido más allá de la próstata, pueden recomendarse pruebas de diagnóstico por imágenes como TAC abdominal y Gammagrafía ósea para descartar la presencia de afectación de ganglios linfáticos, afectación de órganos y metástasis ósea.
La operación robótica se recomienda en una variedad de situaciones donde sus ventajas pueden mejorar significativamente los resultados para el paciente en comparación con la cirugía abierta o laparoscópica tradicional. Se considera especialmente beneficiosa en procedimientos complejos donde se requiere una alta precisión y destreza quirúrgica en espacios reducidos, en pacientes con comorbilidades y/o cuando se busca preservar la función urinaria o eréctil.
Es normal sangrar después de una biopsia de próstata durante una o dos semanas, dependiendo del tipo de sangrado. Puede haber sangre en la orina, en las heces o/y en el semen.
A los 50 años s recomendable hacer un PSA, análisis de sangre para medir el Antígeno Prostático Específico que ayuda a detectar posibles anomalías en la próstata. Si en tu familia antecedentes antecedentes de cáncer de mama o próstata, se recomienda empezar el control hacia los 45 años debido al mayor riesgo asociado a padecer cáncer de próstata.
Es suficiente con la realización de PSA y un tacto rectal –especialmente si el PSA es superior a 2,5-. En algunas ocasiones se puede realizar ecografía, flujometría o incluso tests genéticos para estudiar distintos aspectos de la próstata.
Salvage lymph node dissection in patients with prostate cancer treated with radical prostatectomy or radiotherapy and positive choline positron emission tomography (PET/CT) scan