Un diagnóstico bien realizado y en el momento adecuado puede salvarte la vida. Contamos con los mejores especialista de en la unidad, con tratamientos pioneros basadas en las últimas investigaciones y la tecnología más innovadora para mejorar tu calidad de vida.
El cáncer de próstata no presenta síntomas en sus fases iniciales. Por este motivo, es muy importante acudir al urólogo para un diagnostico temprano del cáncer de próstata mediante las siguientes pruebas:
Si se detecta alguna anormalidad en las pruebas anteriores, se puede indicar la realización de otras pruebas, como las siguientes, para determinar si se tiene cáncer de próstata:
Cuando la biopsia confirma la existencia de un cáncer de próstata, el siguiente paso es determinar su nivel de agresividad (grado). Un mayor grado indica un cáncer más agresivo con mayor probabilidad de metastatizar o propagarse rápidamente. Con el fin de determinar la agresividad del tumor, las técnicas utilizadas incluyen:
Aparte de estas pruebas, hoy en día, también se dispone de test diagnósticos que facilitan la detección del cáncer de próstata antes de padecer sintomatología: pro-PSA, 4kalicreinas, PCA-3, MDX y otros.
Una vez que se haya confirmado el diagnóstico, si hay sospecha de que el cáncer puede haberse extendido más allá de la próstata, pueden recomendarse pruebas de diagnóstico por imágenes como TAC abdominal y Gammagrafía ósea para descartar la presencia de afectación de ganglios linfáticos, afectación de órganos y metástasis ósea.
El cáncer de próstata en fases iniciales suele no presentar síntomas, por lo que la única forma de detectarlo precozmente es mediante revisiones médicas. Las pruebas principales son el análisis de PSA en sangre y el tacto rectal. En fases avanzadas pueden aparecer síntomas como dificultad para orinar, aumento de la frecuencia urinaria, sangre en la orina o dolor óseo. Si tienes más de 50 años, o antecedentes familiares, es recomendable acudir al urólogo aunque no tengas molestias.
El cáncer de próstata es curable, especialmente cuando se detecta en fases tempranas. Si el tumor está localizado, las tasas de curación superan el 90 % con tratamientos como cirugía, terapia focal o radioterapia. En casos avanzados, aunque no sea curable, existen terapias muy eficaces que permiten controlarlo durante años. La detección precoz es fundamental para aumentar las posibilidades de curación. Por eso, se recomienda realizar revisiones urológicas periódicas a partir de los 50 años (o antes si hay antecedentes familiares).
La operación robótica se recomienda en una variedad de situaciones donde sus ventajas pueden mejorar significativamente los resultados para el paciente en comparación con la cirugía abierta o laparoscópica tradicional. Se considera especialmente beneficiosa en procedimientos complejos donde se requiere una alta precisión y destreza quirúrgica en espacios reducidos, en pacientes con comorbilidades y/o cuando se busca preservar la función urinaria o eréctil.
Es normal sangrar después de una biopsia de próstata durante una o dos semanas, dependiendo del tipo de sangrado. Puede haber sangre en la orina, en las heces o/y en el semen.
Salvage lymph node dissection in patients with prostate cancer treated with radical prostatectomy or radiotherapy and positive choline positron emission tomography (PET/CT) scan